Anécdotas curiosas de la carrera de una bailarina: Año 2010, en plenas fiestas de San Fermín, Pamplona, bailando con 40 grados, aún recuerdo mi traje confeccionado en Estambul comprado en alguno de los tantos viajes que hice con mi familia, por aquel entonces rondaría los 20 años y siempre buscaba alguna excusa para convencerlos para viajar y acompañarme en busca de mi pasión, la danza, música árabe.
En aquellos viajes había turismo pero también inmersión de cultura. Seleccionaba con cariño mis temas para los espectáculos, este en concreto me encantaba.
Ahí estaba yo con esa calor a pleno mediodía bailando, posiblemente, como una de tantas veces que el suelo del escenario quemaba tanto por haber estado horas al sol, pero hoy no era ese uno de los imprevistos, sino lo siguiente que voy a contar a continuación:
En medio del espectáculo me entra en la boca algo, posiblemente una mosca o mosquito, bastante grande. En esta parte del video no sale, pero en la parte uno que compartiré otro día si, aprovechó un giro bailando sobre mí con el twist de cadera para sacar de mi boca tal animal que se introdujo. Posiblemente nadie se enteró, ¡pero yo sí! Os dais cuenta… hasta el final del espectáculo supe seguir como si nada, aún recuerdo las patitas en mi boca, como dice un refrán, ¡lo que no mata engorda!