Pero hay otra parte que os quiero compartir a continuación que no me siento especialmente orgullosa, por su vulgaridad y por que proviene de algunos clubs nocturnos y con una conotación un tanto sexual, (posiblemente prostíbulos encubiertos).
Siempre he pensado que detrás de la prostitucion hay un negocio, una explotación de mujeres, que para mi ronda el maltrato y que viene de la precariedad de la vida personal, familiar, social y económica de cada una de esas mujeres, y posiblemente tengan una vida muy dura y triste lejos de esas sonrisas y fiestas que nos quieren mostrar.
La prostitución es algo que no apoyo, por que insisto es algo que nadie lo haga por gusto, sino por un cumulo de circustancias, entonces la prostitución siempre a existido y los clubs nocturnos y discotecas con musica donde “mujeres” mejor que “bailarinas” se exiben, en mi opinión esto nunca pueda llamarse “arte” sino simples movimientos y entretenimiento para el disfrute del hombre exclusivo, dentro de un contexto sexual.
El objetivo de este artículo era para que vieseis:
– Que los movimientos de la danza oriental son más antiguos que la prostitución, y que el arte es arte y los movimientos son movimientos.
– Sigo pensando que la danza oriental tiene mucho de gitano como es el caso de estos vídeos de Turquía e Iraq y muchos otros que veo a diario.
En estos videos de los enlaces que muestro abajo de Turquía, es curioso ver cómo cada una de estas bailarinas toca los crótalos, instrumento que nosotras las bailarinas de danzas árabes utilizamos, como las bailarinas de flamenco sus castañuelas.