Siempre me acaricias con tus gentes, con tus olores, con tus vistas, con tus grandes y poderosas mezquitas.
Estambul te quiero. “Seni Seviyorum” Estambul, te echo de menos, “Seni ozledim”
Gracias por mostrarme tu espiritualidad, tu islam grandioso, tu kenafa (postre turco), tu té con sabor único, tus músicos, cantantes…
Tus antiguos e históricos hammam (baños árabes) donde recibir el cariño, el cuidado de una madre.
Estambul, que bonita te ves desde el aire, con tus minaretes apuntando hacia el cielo.